El cine como un medio audiovisual es un
elemento muy a tener en cuenta para la educación en la etapa de Educación
Infantil, ya que el niño a estas edades, absorbe todo lo que ve y oye, es
decir, va asimilando a través de sus sentidos todo lo que ocurre a su
alrededor. A estas edades tan tempranas hay que estimular estos sentidos más
que nunca, puesto que es gracias a ellos
cómo obtienen la principal fuente de información que ayuda a desarrollar y
mejorar su conocimiento.
En la actualidad nos encontramos en la
sociedad de la imagen, por eso la utilización de los soportes audio-visuales
tienen el beneficio de llegar al sujeto de una manera poco dirigida por un
especialista, siendo el receptor del film el que produce sus propias
reflexiones sobre lo que está viendo, asimilándolo (aunque a veces en las
películas, anuncios, etc., se reproduzcan hechos científicos y datos
históricos, de forma incorrecta).
Como docentes, debemos de elegir y seleccionar cuidadosamente, el
contenido de lo que el niño visiona. Escogiendo el tema, formato, materia,
etc., adecuado, para que cumpla con el objetivo que tiene el proyecto educativo
en sí. Para ello, es necesario ofrecerles herramientas con el fin de
poder aumentar su capacidad para leer imágenes, y de este modo, comprenderlas.
Esta habilidad, hay que despertarla cuanto antes en los niños y niñas. Los
docentes no sólo podemos centrarnos en que realicen una buena reflexión sobre
textos leídos o escuchados, debemos de adaptarnos a la sociedad actual y a los
medios que ésta nos ofrezca.
Es necesario que el alumno comprenda que el hecho de ver una película en
horario lectivo, no es simplemente un divertimento; para que esto no ocurra,
entra de nuevo en juego el papel del docente. Se tiene que realizar por parte de
éste, actividades que ayuden y permitan a los niños y niñas reflexionar sobre
lo que han visto y oído. Más tarde, una vez aclarados sus propios pensamientos
e ideas, podrán ponerlo en común con el resto de la clase, creando un coloquio
donde estarán presentes valores tan importantes como el respeto, la escucha y
el concepto de participación democrática, así, todos podrán intercambiar
información y diferentes puntos de vista.
Darle espacio a
los medios audiovisuales en general, y al cine en concreto en las aulas,
consigue que el alumnado, tenga una actitud buena y activa, mientras que ayuda
al educando a generar y tener sus primeras opiniones y observaciones
personales, además de que se pueden trabajar distintas competencias, como por ejemplo la comunicación lingüística, el
conocimiento social y ciudadano, visión cultural y artística, la matemática,
etc.
Un soporte cinematográfico
a modo de ejemplo (más enfocado a Primaria que a Infantil) para enseñar
Ciencias en clase sería la película Ágora de Alejandro Amenabar. Un texto que
trabaja en profundidad este film para enfocarlo a un aula de Secundaria es el
siguiente:
García B., Francisco J. (2010).
“Ágora: una aproximación
al nacimiento del saber Científico”. La Educación
Científica Hoy. Rev. Eureka
Enseñ. Divul. Cien. 7(3). pp. 708-728.
Algunos enlaces de interés: